Todo empézó un sábado 8 de agosto en la T4 de Barajas. Allí nos conocimos el grueso del grupo. Empezó la cosa mal, el vuelo se retrasó. Premonición de alguno que yo me se.
El viaje se desarrolló entre turbulencias, relámpagos y embutidos en unos mini asientos.
La llegada al país desconocido, fue curiosa. La primera sensación fue de un calor húmedo impresionante(así fue todos los días) y un olor un poco asquerosete, al cuál nos terminamos acostumbrando.
El transporte hasta la residencia(que luego resultó hotelazo de 4 estrellas), se realizó en un microbus-furgoneta. Un acojone impresionante, el conductor, parecía un mafioso, y su manera de conducir, más bien parecía la de Alonso.
En el hotel nos acoplamos después de un rato largo de organización.
A mi me tocó en un 2º piso, y mi habitación estaba sola. De ahi bajamos a ver el panorama. Al ser sábado, todo medio chapado, asique terminamos tomando una cerveza en un turco.
Volvimos al amanecer.
El 2º día me encontré una sorpresa en la habitación, un italiano que tenía de compañero, al poco llegaron otros dos. Gente peculiar.
Este 2º día, el problema que tuvimos fue encontrar botellas de alcohol a precio razonable. Creo que a nadie se le va a olvidar el sabor del Capitan Morgan, que aunque yo reitero que no es mal ron, a la gente no le gustó. Pero caro era, 22 euros la botella.
Esa noche hicimos botellón en una cuesta, después de que nos echasen de diversos sitios. Luego fuimos de fiesta, unas cachimbas en el Fuego y los más valientes finalizamos bañandonos en la playa. Gran noche.
To be continue... (si se me olvida algo completad)
1 comentario:
jajajaja.... si Ruben, se te olvida algo... uno de los momentos mas raros e importantes de todo el viaje... cuando vimos desde fuera por primera vez el mitico "fuego" y todos nos kedamos mirandolos asi con cara de apamplaos sin saber k acabariamos conociendonoslo de arriba a abajo....
Miguel
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